La crisis acelerada (que no desatada) en el PSOE tras las elecciones del pasado 25M llevará al partido a una nueva dirección. Esa dirección podría ser continuista (Susana Díaz), o bien un giro a la izquierda.
Parece que está claro que lo más adecuado para llegar a un electorado que votó en un 70% a la izquierda es lo segundo, además de ser más consecuente con las siglas del partido (eso de OBRERO está olvidado, lo de SOCIALISTA puede que siga ahí, pero descafeinado).
Además está la necesidad de renovación. Caras jóvenes. Un dirigente con pelo largo, de 35 años. Me refiero por supuesto al Felipe González en 1977. ¿Es eso lo que necesita el partido? No creo. Eso sería de nuevo ir de segundón. Antes del PP y su neoliberalismo, ahora de la coleta de Pablo Iglesias. Sí, hay nombres jóvenes interesantes (como Eduardo Madina), pero se han fogueado en la política a la sombra de Rubalcaba y Zapatero y eso podría ir en su contra.
Podría ser que el PSOE hiciera una especie de "Operación Francisco". Cuando todo el mundo esperaba un nuevo Papa "jóven", se eligió a un hombre mayor, pero que resultó que tenía coraje e ideas renovadoras. Podría ser que el Francisco del PSOE fuera Jose Antonio Pérez Tapias, filósofo, ex-diputado y militante. Es el primer candidato que se presenta a liderar el partido.
Lo que está claro es que la crisis interna se resolverá en uno u otro sentido en breve. De esa decisión depende el futuro electoral de un partido que por el camino que ha estado yendo está condenado a desaparecer.
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